El reloj más complejo de Tag Heuer

Con la combinación de un innovador savoir-faire y los logros científicos, TAG Heuer presenta en el Salón Internacional de la Alta Relojería de Ginebra su nueva y revolucionaria espiral en el reloj más complejo que ha creado hasta la fecha.

Por primera vez, los científicos de TAG Heuer han desarrollado una espiral de compuesto de carbono que, ensamblada átomo por átomo a partir de carbono elemental, regula las oscilaciones del péndulo. Este compuesto extremadamente complejo, presenta una excepcional resistencia a los golpes, al magnetismo y a los cambios de temperatura.

Como el auténtico corazón de un reloj mecánico, la espiral de compuesto de carbono requiere un savoir-faire único. Creado y ensamblado por los relojeros de TAG Heuer, su nivel de calidad garantiza una precisión óptima y mejora el rendimiento cronométrico.

La espiral de compuesto de carbono está combinada con un péndulo de aluminio con insertos de oro blanco. La geometría y las oscilaciones perfectamente concéntricas mejoran el rendimiento cronométrico, confiriéndole una firma única al latido del corazón del reloj.

Una innovación sin precedentes

Además de ser el primer reloj regulado por esta espiral de compuesto de carbono, el TAG Heuer Carrera Calibre Heuer 02T Tourbillon también presenta otras dos complicaciones, entre las más prestigiosas de la relojería tradicional: un tourbillon con movilidad casi hipnótica que elimina las diferencias de marcha y un cronógrafo certificado por el COSC que cumple con las normas oficiales para cronómetros.

Un diseño revolucionario

La estructura hexagonal nanoscópica (un millón de veces más pequeña que un milímetro) del material compuesto de carbono se encuentra en el diseño del Carrera HEUER 02T Tourbillon Nanógrafo – el último modelo de la icónica colección de la marca desde 1963.

Por su parte, la esfera multicapa presenta hexágonos con un acabado arenado y finamente cepillado en la placa del movimiento, visible a través de una esfera abierta. El patrón también se encuentra en la masa oscilante negra, que ha sido tratada con PVD y revelada por un fondo de cristal de zafiro.

Una vez más, TAG Heuer demuestra su espíritu vanguardista ampliando los límites, acercándose cada vez más a una precisión perfecta en la relojería mecánica.

 

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