Los All Blacks estrenan imponente reloj de Tudor

La colaboración de Tudor con la Rugby World Cup 2019 y con el equipo nacional de rugby de Nueva Zelanda han dado origen al nuevo Black Bay Chrono Dark, disponible en todo el mundo desde el 20 de septiembre.
Desde un punto de vista estético, el color de este reloj supone un paso transgresor para Rolex, su casa de origen. Al igual que ocurre en otros modelos de Tudor como el Black Bay Chrono, el Black Bay Chrono Dark presenta claras reminiscencias del Rolex Daytona, como los pulsadores de cronógrafo roscados y la tipografía y grafismos empleados en la escala taquimétrica, grabada en el bisel. ¡Ojo!, también hay claras diferencias, siendo los Black Bay cronógrafos “bicompax”, con contadores a las 3 y a las 9, mientras que el Daytona es un cronógrafo “tricompax” con los contadores a las 3, las 6 y las 9, eliminándose en el Black Bay el contador de las horas del cronógrafo.
El principal rasgo distintivo de este Black Bay Chrono Dark es el acabado negro tan llamativo, conseguido mediante proceso PVD (Physical Vapour Deposition). No es la primera vez que Tudor presenta algo parecido, ya que en la misma serie Black Bay existe un “diver” con este mismo tipo de acabado. En lo relativo al tamaño, estamos ante un reloj bastante más conservador, con unos equilibrados 41 mm y un brazalete metálico tipo Oyster, que lo hacen muy cómodo de llevar.
En el plano técnico, el Black Bay Chrono Dark posee un movimiento de cronógrafo de gran nivel, el Tudor MT5813, que, entre otros refinamientos, presenta 70 horas de reserva de marcha y rueda de pilares para la gestión de las funciones del cronógrafo. Este movimiento deriva del Breitling B01, sobre el cual Tudor ha hecho algunas modificaciones reseñables, como la eliminación del tercer contador,que sí existe en el movimiento original de Breitling, y la sustitución de la espiral de balance metálica usada por Breitling por una espiral de balance de silicio, inmune a campos magnéticos.
Tudor ha rediseñado todo el escape, ya que también ha eliminado el órgano de ajuste presente en el B01 y este se ha reemplazado por micro tornillos aplicados directamente sobre el volante de inercia, al estilo Rolex.
Cabe mencionar que la colaboración de Tudor y Breitling se ha dado en las dos direcciones, ya que mientras Tudor basa sus cronógrafos de la serie Black Bay en el citado movimiento B01 de Breitling (rebautizado por Tudor como MT5813), Tudor a su vez ha permitido a Breitling el uso de su movimiento MT5612, que Breitling está empleando actualmente en sus modelos Superocean Heritage II.

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