Senator Chronometer: 10 años dando la hora

Desde hace una década, el Senator Chronometer combina su precisión certificada y una larga tradición para cumplir con los más altos estándares. En 2019, Glashütte Original celebra el aniversario de un reloj que atesora el incomparable legado de la construcción del cronómetro alemán y que, al mismo tiempo, se adentra en el futuro de manera innovadora.

Generaciones de exploradores y marinos confiaron en los cronómetros náuticos —resistentes y precisos relojes para barcos—, que eran mucho más que unos simples instrumentos. Envueltos en sus preciosas cajas de madera, desafiaron a las olas más peligrosas y a las condiciones climáticas más intempestivas. Su labor ayudó a los marineros a navegar con seguridad por los indómitos océanos de todo el mundo. En el proceso, se convirtieron en accesorios indispensables para los capitanes de barcos y supusieron toda una inspiración para los maestros relojeros de Glashütte Original.

En 2009, la manufactura sajona rindió un evocador homenaje a estos legendarios y robustos relojes: así nació el Senator Chronometer, un elegante y sofisticado modelo de muñeca. La versión más reciente, que incorpora un diseño contemporáneo con una renovada caja oro rojo y un bisel más fino, se presentó la pasada primavera. Al igual que sus predecesores, su certificada precisión acompaña al usuario en todos los momentos de su vida.

Todas y cada una de las piezas de este modelo se someten a las pruebas efectuadas por parte del Servicio de Calibración Alemán, que durante quince días se sirve de estrictas normas para medir su rendimiento. El reloj puede ostentar el título de «cronómetro» solo si supera las pruebas en cinco posiciones y a tres temperaturas diferentes con una desviación diaria de marcha máxima no superior a dos segundos.  El movimiento de cuerda manual Calibre 58-01, creado en la manufactura, con mecanismo de puesta a cero, fecha panorámica con «salto de fecha» y una reserva de marcha algo inferior a 45 horas satisface todos los criterios sin mayor dificultad.

Todo un clásico
Este sofisticado mecanismo ya sentó las bases del primer Senator Chronometer, presentado en color oro rosa en 2009. Con este reloj, Glashütte Original creó todo un clásico, elegido «reloj del año» en 2010 por los lectores de la revista especializada «Armbanduhren» («Relojes de pulsera» en alemán).

Pocos años después, uno de sus sucesores recibió también los elogios de los más entendidos del mundo de la alta relojería: la versión en oro blanco, con su expresiva esfera azul, recibió el premio «Golden Balance», concedido por la revista «Uhren-Magazin» («Revista sobre relojes» en alemán). Por si esto fuera poco, en 2010 Glashütte presentó una edición limitada en platino, formada por trece exclusivos juegos: cada uno de ellos incluía un Senator Chronometer en platino y un cronómetro náutico restaurado original de Glashütte envueltos en una caja artesanal de roble — una combinación irresistible para los aficionados al elevado arte de la relojería.

Estos precisos relojes y su rica tradición inspiraron el diseño de la esfera de la última incorporación a la línea: los contadores, entre los que destaca el contador de tiempo en funcionamiento con el discreto indicador día/noche, siguen la misma disposición que sus históricos predecesores. Por encima, las agujas «poire» (con forma de pera) en acero azulado siguen su curso, enmarcadas en una vuelta de horas de estilo rail road negro galvánico grabada con láser, números romanos y el característico y fino bisel de la nueva caja en oro rojo, lo que ofrece incluso más espacio para la increíble esfera del reloj. Además, a través del fondo de caja de cristal de zafiro, se puede apreciar el elegante movimiento y su platina de tres cuartos decorada con elegancia, sin olvidarnos de los chatones de oro montados sobre tornillos y el puente de volante grabado a mano.

Desde hace una década, los relojeros de Glashütte Original han seguido con éxito una premisa básica: continuar desarrollando el clásico y elegante diseño del Senator Chronometer sin dejar de lado su carácter de larga tradición.

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